Psiquiatría ortomolecular

Autor: Miguel Leopoldo Alvarado, N.D.

INTRODUCCIÓN

Antes de que el método ortomolecular fuera aplicado en otras áreas de las ciencias de la salud como la dietética, la nutrición y la medicina, primero se implementó en la psiquiatría, dando origen a la psiquiatría ortomolecular.

Pauling y colaboradores fundaron la Academia de Medicina Ortomolecular con la finalidad de “incrementar el conocimiento científico en el ámbito de la psiquiatría y servir de punto de encuentro para los profesionales interesados en expandir sus conocimientos en este terreno”…. Lo que se pretende, es “la aplicación clínica de la psiquiatría ortomolecular para aliviar los trastornos mentales, y estudiar la manera de lograr que todos los ciudadanos, incluyendo aquellos que no padecen enfermedades mentales, alcancen un optimo funcionamiento psíquico”.

En efecto, en el transcurso de sus investigaciones de bioquímica humana, un gran número de investigadores ha ido encontrando pruebas contundentes de que los trastornos mentales y otras enfermedades de tipo degenerativo, se encuentran directamente relacionadas entre sí, a procesos metabólicos similares que dependen de la nutrición. Sus investigaciones abrieron la puerta a una serie de descubrimientos que pueden ayudar a aliviar con mucho, el sufrimiento humano, y desembocar en una mejoría generalizada de la salud del género humano.

En el boletín The Journal of Orthomolecular Medicine, así como en la Fundación contra la Esquizofrenia de Canadá, diversos autores e investigadores consideran que estamos inmersos en “una revolución biológica, que la medicina ortomolecular puede acelerar”… Numerosos doctores han estado tratando de forma habitual la esquizofrenia, las dificultades del aprendizaje, la adicción a las drogas, la pelagra, el alcoholismo y la pérdida de la memoria, con una combinación de complementos nutritivos prescritos en dosis superiores a las RDA, y una dieta cuidadosamente controlada. El objetivo: proporcionar a cada personal un abastecimiento óptimo de nutrientes y de otras biomoléculas, con el propósito de maximizar el potencial humano individual, y el comportamiento social.

DESCRIPCIÓN

“Para la psiquiatría ortomolecular, el tratamiento básico de las enfermedades mentales reside en subsanar los efectos perjudiciales de una mala nutrición, prescribiendo una alimentación correcta… Su papel fundamental consiste en recomendar una dosificación de nutrientes, apropiada para cada paciente” (Hoffer, 1998)

Linus Pauling (1968) definió la psiquiatría ortomolecular como “el tratamiento de enfermedades mentales mediante la creación de un entorno molecular óptimo para la mente, especialmente de la concentración óptima de las sustancias que normalmente se encuentran presentes en el organismo humano”.

Bajo esta perspectiva, la psiquiatría ortomolecular consiste en la prevención y tratamiento de la enfermedad mental, mediante la construcción de un microentorno óptimo, a escala molecular, para las células del cerebro humano. Lograr que la mente humana funcione lo mejor posible, es factible cuando se consigue implementar las concentraciones apropiadas de nutrientes y de otras biomoléculas afines a la naturaleza del cuerpo humano, y que son necesarias para el funcionamiento, mantenimiento y la reparación de las neuronas cerebrales.

FACTORES CAUSANTES DE LAS ENFERMEDADES PSÍQUICAS

La psiquiatría ortomolecular sostiene que tanto las enfermedades psíquicas, como los trastornos emocionales y de comportamiento, son producto principalmente de un desequilibrio químico en el microambiente de las neuronas cerebrales, generado por un abastecimiento desequilibrado de nutrientes, por la presencia de sustancias químicas artificiales ajenas a la naturaleza, provenientes tanto de la polución ambiental, como de los alimentos industrializados y/o contaminados, así como por necesidades nutricionales individuales insatisfechas.

Algunas enfermedades como la esquizofrenia, pueden surgir en ciertos polimorfismos humanos, caracterizados por necesidades anormalmente elevadas e insatisfechas, de algunos nutrientes específicos como la niacina (vitamina B 3). Además del factor congénito hereditario, diversos factores ambientales, de estilo de vida, y psicosociales, pueden influir e incrementar aún más la necesidad de algunos nutrientes, agravando las enfermedades mentales.

Diversos factores que forman parte del estilo de vida como el estrés, una mala alimentación, compuesta por alimentos elaborados con ingredientes refinados, y aditivos químicos (caracterizada por su exceso de sustratos energéticos, y pobreza en aminoácidos, micronutrientes y nutrientes accesorios), degradan el microambiente celular (terreno biológico), ocasionando un deterioro de las neuronas y por lo tanto, del funcionamiento cerebral, afectando la percepción, la personalidad, las emociones, las operaciones mentales y el comportamiento.

FACTORES HEREDITARIOS: HERENCIA GENÉTICA

La herencia y la variabilidad genética congénita, pueden producir ciertos polimorfismos humanos caracterizados por necesidades de nutrientes superiores a las “normales”, por lo que ciertas personas suelen requerir nutrientes extras en forma de complementos nutritivos para lograr un funcionamiento cerebral óptimo y prevenir enfermedades mentales y trastornos del comportamiento.

FACTORES DESENCADENANTES

Algunos alimentos industrializados como los carbohidratos refinados generan glucocilación no enzimática de las proteínas del endotelio vascular y de las neuronas nerviosas y cerebrales, pudiendo producir una generación en cadena de radicales libres, lesionándolas, además de ocasionar bruscos altibajos de glucosa en la sangre que afectan fuertemente las emociones y el comportamiento humano.

Algunos químicos tóxicos presentes en los alimentos industrializados como conservadores, potenciadores de sabor, colorantes y saborizantes además de otros, pueden afectar severamente la química cerebral.

Los aceites y las grasas industrializadas, así como insuficiencias previas de ácidos grasos esenciales, y de antioxidantes, pueden afectar severamente la estructura, estabilidad, permeabilidad y potencial eléctrico de las membranas de las neuronas y afectar con ello la psique humana.

Sabido es que una excesiva carga de estrés, las radiaciones, la insuficiente o excesiva actividad física, los problemas emocionales y psicosociales, la insatisfacción personal, y las enfermedades previas, pueden producir o agravar condiciones anormales de las emociones y del comportamiento.

Si las necesidades de nutrientes superiores a las normales (trátese de condiciones congeniticas y por lo tanto de polimorfismos especiales, o de necesidades artificialmente incrementadas por factores ambientales), no son satisfechas de manera adecuada y óptima, finalmente, el cuerpo se enfermará, y en forma especial el cerebro sufrirá las peores consecuencias.

CREADORES DE LA PSIQUIATRÍA ORTOMOLECULAR

La psiquiatría ortomolecular fue propuesta y utilizada con éxito por primera para el tratamiento de la esquizofrenia. En 1950 los colegas y discípulos de Linus Pauling, doctores Abraham Hoffer,Morton Walker y Humphrey Osmond, administraron a enfermos mentales, una dieta compuesta exclusivamente de alimentos naturales sin refinar, junto a un tratamiento de complementos nutritivos individualmente diseñado, con vitaminas C y B 3 (niacina), en dosis superiores a lasasignaciones dietéticas recomendadas (RDA), diseñadas por el Consejo sobre Alimentos y Nutrición, la Academia Nacional de Ciencias, y el Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos.

Previamente, Roger J. Williams, había obtenido éxitos notables en el tratamiento de las adicciones, en especial del alcoholismo, suprimiendo los alimentos refinados, junto a la prescripción de vitaminas B 1 (Tiamina) y B 5 (Ácido Pantoténico), en dosificaciones individualizadas, también superiores a las RDA.

En consonancia con las enseñanzas y recomendaciones del Roger J. Williams de la Universidad de Texas, además del éxito en la esquizofrenia, el método ortomolecular, ha sido comprobado en otras enfermedades crónicodegenerativas.

Actualmente, la psiquiatría ortomolecular prescribe además de dietas saludables individualizadas, complementos nutritivos en optidosis (lo que algunos autores denominan megadosis) de vitaminas, minerales, oligoelementos, nutrientes accesorios, fitoquímicos, antioxidantes, y algunas otras sustancias naturales.